Desde el año 2020 se han visto reducidas las lluvias en México y los resultados han sido grandes temporadas de sequía en muchas partes del país. Este año, de acuerdo con la Conagua (Comisión Nacional del Agua), el área del país con sequía de moderada a excepcional fue de 30.4%, mientras que en el mismo mes de 2020 fue de 8.97%, es decir, arriba de tres veces más. Aunque fue menor que el año anterior, aún hay mucho trabajo por hacer para llegar al mismo nivel que en 2020.
La forma en la que se ha combatido esta sequía y el desabasto de agua ha sido con políticas públicas que en muchas ocasiones han afectado a la población de grandes ciudades. En especial en el estado de Nuevo León, se han impuesto cortes de agua rutinarios para evitar que se desperdicie este recurso. La población ha crecido, por lo que se requiere más agua, no solamente para beber y para actividades de higiene, sino también para cultivos y otras actividades agrícolas.
Causas de la sequía y desabasto de agua en México
Realmente la causa principal de una sequía es la falta de lluvia. Esta falta puede ser por diferentes razones atmosféricas y climáticas, y por lo general duran de uno a tres años, aunque podría ser diferente en algunos casos. Dependiendo del lugar del mundo, en algunas regiones se puede considerar una sequía si no llueve en seis días, mientras que en otros lugares puede apenas considerarse sequía si no llueve en dos años.
El problema que ha venido aumentando por la falta de lluvias, se ha convertido en un problema de desabasto de agua. Los Gobiernos Federal y Estatales no pueden más que cuidar el agua que se tiene y tratar de optimizar su uso lo mejor que se pueda para no llegar a un problema de escasez más serio. Las presas como Calderón en Jalisco, Valle de Bravo en el Estado de México y el lago Cuitzeo en Michoacán, han sido de las más afectadas, ya que dependen del caudal del río Cutzamala, que se encuentra por debajo del 30% de la media histórica entre 1996 y 2020.
Qué hacer y cómo aportar a la solución del problema
Si bien los gobiernos han hecho lo que ha estado en sus manos para resolver esta problemática, es importante de igual forma adoptar una cultura de ahorro de agua de forma individual y en casa para cuidar el agua que llega. Se pueden adoptar un conjunto de actitudes, costumbres, y hábitos de forma permanente que ayuden a prevenir el desabasto de agua en el país.
Uno de los valores más importantes que se pueden adoptar para hacer frente al desabasto de agua es el respeto al medio ambiente. El agua es parte de la Tierra, por lo que es importante adoptar una forma de pensamiento en la que se considere cuidar y respetar cualquier cosa que exista en el planeta, incluyendo el agua. Al comprender la importancia de la conexión que existe en todo lo que vive en el planeta, garantizar la existencia de otros seres vivos, y entender que la diversidad biológica existe para mantener la cantidad y calidad del agua, se puede realmente estar consciente de su cuidado durante todo momento.
Una vez entendido el papel del agua en el medio ambiente, ya se pueden empezar a tomar medidas de forma individual que hagan una gran diferencia, sobre todo al crear los hábitos.
- Bañarse en menos tiempo. De las actividades individuales del día a día, bañarse es en la que más se usa agua. Es por eso que se debe ser consciente de la cantidad de agua que se está usando, de modo que se pueda crear el hábito de usar la menor cantidad posible.
- Cuidar las fugas de agua. Algunas veces, las fugas de agua en casa son muy dificiles de detectar, pero pueden desperdiciar mucha agua. Es importante dar mantenimiento a los tinacos y cisternas, así como revisar de forma regular que no hayan fugas. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) recomienda lavar los tinacos y cisternas cada seis meses y mes mejor hacerlo con un servicio experto como es Plomerísimo.com, con todo el respaldo de Rotoplas. No solo cuentan con el servicio de lavado de tinacos y cisternas, sino que también se pueden revisar fugas, por lo que se puede aprovechar las visitas para el lavado para revisar que no se esté desperdiciando el agua. De sólo una gotera se pueden desperdiciar más de dos litros al día, por lo que una fuga más grande puede tener consecuencias desastrosas.
- Usar la lavadora a su máxima capacidad. En este punto, también aplica para la lavadora de platos. Ambos son electrodomésticos muy útiles, sin embargo, es importante optimizar su uso, utilizándolas al máximo de su capacidad, sobre todo con la lavadora de platos. Es mejor lavarlos a mano si habrá pocos. Igualmente lavarlos con jabón sin correr el agua, y enjuagarlos con un chorro moderado de agua.
- Regar las plantas antes de que salga al sol, o después de que ponga. Al regar las plantas cuando hay sol, sobre todo al medio día, el agua se evapora más rápido, por lo que las plantas no la aprovechan. De este modo se regará menos veces, asegurándose de optimizar el uso del agua.
- Pequeños cambios en el baño. Desde lavarse los dientes o rasurarse, se puede utilizar sólo un vaso o recipiente con agua, de forma que no se use más de la necesaria. Para no usar tanta agua en el inodoro, se puede meter una botella de plástico llena de agua en el tanque para que no se llene a su máxima capacidad y así combatir el desabasto de agua.