¿Cómo prevenirse contra la sequía y escasez de agua?

La escasez de agua y las sequías se encuentran entre las consecuencias más tangibles y devastadoras de la crisis climática. Afectan cada vez más a las comunidades de todo el planeta, causando estragos en las sociedades, la economía y los impactos ambientales. Descubre diferentes maneras de hacer frente a la sequía y escasez de agua siguiendo estos prácticos consejos.

Sequía y escasez de agua

El agua es la base de la salud humana y ecológica y cubre el 70% de nuestro mundo. Es esencial para la agricultura, el saneamiento, la industria, la recreación, la energía y el mantenimiento de los ecosistemas naturales.

La escasez de agua se origina por diferentes factores, incluido el cambio climático, que está alterando los patrones de precipitaciones, nevadas y escorrentías. El crecimiento de la población y los cambios demográficos también causan cambios en la demanda de agua. Para mitigar el problema de escasez de agua es necesario aplicar soluciones de gestión del agua que consideren todos estos factores.

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¿Qué pueden hacer los estados?

Planes estatales de agua. Muchos estados tienen planes de agua, pero pocos incorporan completamente el cambio climático y los conceptos modernos de planificación integrada de recursos hídricos.

Pozos domésticos. Limitar el impacto de los pozos domésticos en las aguas subterráneas y los caudales de los arroyos es cada vez más importante para reducir el impacto de la contaminación.

Ahorrar agua: tips

Evita las actividades no esenciales que consumen mucha agua. Las actividades que utilizan mucha agua, como lavar el automóvil, llenar una alberca infantil o jugar con aspersores en el jardín, pueden ser cosas agradables para hacer en el verano, pero consumen mucha agua y, a menudo, no son esenciales.

Tratamiento del agua

Usa menos agua en tu hogar. Existen muchas acciones, que puedes aplicar en tus rutinas diarias, para reducir la cantidad de agua que usas. Acortar la ducha a un máximo de cuatro minutos o llenar la bañera unos centímetros menos de lo normal puede marcar una gran diferencia. Cerrar el grifo mientras te cepillas los dientes puede ahorrar miles de litros de agua al año. Y recuerda: usa solo la descarga adecuada en tu inodoro.

Si tienes que lavar los platos entre usos del lavavajillas, llena un recipiente a menos de la mitad con agua caliente, agrega un poco de jabón para lavar platos, frota los platos en el recipiente, enjuaga la espuma con agua (pasar por encima del recipiente) y luego seca a mano. Tu agua usada, también conocida como agua gris, se puede reutilizar para descargar inodoros o regar tus plantas.

En la cocina, solo llena la tetera con la cantidad necesaria de agua. Si lavas los platos en el fregadero, asegúrate de usar un recipiente para lavar platos y usa el agua sobrante para limpiar tus materiales reciclables.

Los electrodomésticos que usan agua, como el lavavajillas y la lavadora, sólo deben funcionar una vez que tengan una carga completa. Esto ayudará a ahorrar agua y energía. Además, asegúrate de usar estos electrodomésticos fuera de las horas pico para ahorrar un poco de dinero.

Recolectar y utilizar aguas grises. El agua gris (también llamada agua residual) es básicamente agua que ya has usado una vez. Por ejemplo, cuando te estás duchando o si lavas algunos platos a mano, puedes recolectar aguas grises en un balde y luego usarla para regar tus plantas, las flores o los árboles de tu jardín. Hacer esto es una forma sencilla de conservar agua y aprovechar al máximo lo que tienes. También asegúrate de seguir las pautas estatales y locales sobre el uso de aguas grises en tu área.

Usa menos agua en el jardín. Si tienes la suerte de tener un jardín, sabrás que las plantas y las flores requieren mucha agua durante los climas cálidos. Evita usar una manguera para regar tu jardín y, en su lugar, usa una regadera; regar temprano en la mañana o más tarde en la noche reducirá la cantidad de agua que se evapora.

Considera comprar un tanque de almacenamiento, esto te permitirá usar agua de lluvia para regar tus plantas, o incluso puedes usarlo para otras cosas cómo limpiar tu automóvil. También puedes usar el agua sobrante del baño, el fregadero o el lavado para regar tus plantas, siempre que no contenga productos químicos nocivos como la lejía.

Los sistemas de captación de agua de lluvia no llevan una instalación demasiado complicada y son una excelente opción para todo tipo de construcción. Un ejemplo es el Captador Pluvial Urbano de Rotoplas. Práctico y muy eficiente es un sistema moderno que reduce al máximo el consumo de agua de manera ecológica.

Mantente hidratado. Mantenerse hidratado es de vital importancia, así que continúa bebiendo mucha agua todos los días, especialmente cuando el clima es más cálido y te encuentras afuera bajo el sol. También llévate contigo una botella reutilizable para ahorrar dinero en la compra de agua embotellada y así reducir el consumo de plástico.

Evita dejar el grifo abierto. Dejar el grifo abierto mientras lavas los platos en el fregadero, te cepillas los dientes o te lavas la cara o el cuerpo puede significar desperdiciar bastante agua. Una opción más ecológica sería cerrar el grifo una vez que hayas mojado el plato, el cepillo de dientes o tu cuerpo. Luego frota, solo volviendo a abrir el agua para enjuagar las cosas.